Los parásitos internos en perros son un problema común y potencialmente grave que puede afectar la salud y el bienestar de nuestras mascotas. Algunos de los parásitos internos más comunes en perros incluyen gusanos redondos, gusanos planos, gusanos del corazón y protozoarios. En este artículo, analizaremos los diversos tipos de parásitos internos que afectan a los perros, cómo se transmiten y las opciones de tratamiento y prevención disponibles.
Gusanos redondos (nematodos)
Los gusanos redondos, como Toxocara canis y Toxascaris leonina, son parásitos intestinales comunes en perros. Estos gusanos pueden causar síntomas como vómitos, diarrea, pérdida de peso y un vientre hinchado. Los perros pueden infectarse al ingerir huevos de gusanos del suelo o al comer presas infectadas, como roedores. Los cachorros también pueden infectarse a través de la leche materna (1).
Gusanos planos (cestodos)
Los gusanos planos, como Dipylidium caninum y Taenia spp., son otro tipo de parásito intestinal que afecta a los perros. Estos gusanos se transmiten a través de la ingestión de pulgas o roedores infectados. Los síntomas pueden incluir diarrea, pérdida de peso y la presencia de segmentos de gusanos en las heces (2).
Los áscaris (Toxocara canis), los anquilostomas (Ancylostoma spp.) y los tricocéfalos (Trichuris vulpis) son lombrices intestinales comunes que afectan a los perros. Estos parásitos pueden causar síntomas como diarrea, vómitos, pérdida de peso, distensión abdominal y letargo.
Las tenias son parásitos planos que viven en el intestino delgado de los perros. Pueden causar picazón en la zona anal, arrastrar el trasero por el suelo y pérdida de peso.
Gusanos del corazón (Dirofilaria immitis)
Los gusanos del corazón son un parásito particularmente peligroso que se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados. Los gusanos del corazón pueden causar insuficiencia cardíaca, dificultad para respirar y, finalmente, la muerte si no se tratan (3).
La Dirofilaria Immitis, también gusanos del corazón (Dirofilaria immitis) son parásitos transmitidos por mosquitos que afectan a los perros. Pueden causar síntomas como tos, intolerancia al ejercicio, pérdida de peso, distensión abdominal y letargo.
Protozoarios
Los perros también pueden verse afectados por protozoarios parásitos, como Giardia y Coccidia. Estos parásitos se transmiten a través de la ingestión de quistes presentes en el agua o en las heces de animales infectados. Los síntomas pueden incluir diarrea, pérdida de peso y deshidratación (4).
Los coccidios son parásitos unicelulares que infectan el tracto intestinal de los perros. Pueden causar diarrea (que puede contener sangre o moco), deshidratación, pérdida de apetito y debilidad.
Giardia es un parásito unicelular que infecta el intestino delgado de los perros. Puede causar diarrea fétida y grasosa, pérdida de peso, vómitos y deshidratación.
Síntomas
- Diarrea o heces blandas: Los parásitos internos pueden causar malestar gastrointestinal, resultando en diarrea o heces blandas.
- Pérdida de peso o dificultad para ganarlo, especialmente en cachorros: Los parásitos pueden afectar la absorción de nutrientes, lo que lleva a la pérdida de peso o dificultad para ganarlo.
- Hinchazón abdominal: La presencia de parásitos en el sistema digestivo puede causar hinchazón abdominal.
- Anemia: Algunos parásitos, como los gusanos intestinales, pueden causar anemia al alimentarse de la sangre del perro.
- Fatiga o debilidad: La anemia y la falta de nutrientes pueden provocar fatiga o debilidad en el perro.
- Tos, especialmente en el caso de gusanos del corazón: Los gusanos del corazón pueden causar tos, ya que afectan el sistema circulatorio y el corazón.
- En casos severos, los gusanos pueden ser visibles en las heces o alrededor del área anal del perro.
- Vómitos: Algunos perros pueden experimentar vómitos como resultado de la irritación gastrointestinal causada por los parásitos internos.
- Apatía: La falta de energía y apatía pueden ser síntomas de una infestación parasitaria interna, especialmente si se acompañan de otros síntomas mencionados anteriormente.
- Cambios en el apetito: Los parásitos internos pueden afectar el apetito del perro, lo que puede resultar en un aumento o disminución del consumo de alimentos.
Tratamiento y prevención
El tratamiento para los parásitos internos en perros generalmente implica el uso de medicamentos antiparasitarios prescritos por un veterinario. Es importante llevar a su perro al veterinario para un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento específico.
La prevención de parásitos internos en perros incluye prácticas como mantener a su perro alejado de las heces de otros animales, administrar tratamientos antipulgas y antiparasitarios de forma regular y llevar a su perro a chequeos veterinarios periódicos.
Fuentes:
- Bowman, D. D. (2011). Helminths. In: Greene CE, editor. Infectious Diseases of the Dog and Cat. 4th ed. St. Louis: Elsevier Saunders; p. 769–797.
- Olson, P. D., & Littlewood, D. T. J. (2002). Phylogenetics of the Monogenea—evidence from a medley of molecules. International Journal for Parasitology, 32(3), 233-244.
- Atkins, C. E. (2003). Comparison of results of three commercial heartworm antigen test kits in dogs with low heartworm burdens. Journal of the American Veterinary Medical Association, 222(9), 1221-1223.
- Thompson, R. C. A. (2004). The zoonotic significance and molecular epidemiology of Giardia and giardiasis. Veterinary Parasitology, 126(1-2), 15-35.
En resumen, los parásitos internos en perros son una preocupación importante para la salud y el bienestar de nuestras mascotas. Los propietarios de perros deben estar conscientes de los diversos tipos de parásitos internos que pueden afectar a sus mascotas y tomar medidas preventivas para reducir el riesgo de infección.
La educación y la concienciación sobre los parásitos internos en perros son cruciales para mantener a nuestras mascotas saludables y protegidas. Al mantener a su perro alejado de las heces de otros animales, administrar tratamientos antipulgas y antiparasitarios de forma regular y llevar a su perro a chequeos veterinarios periódicos, puede ayudar a garantizar que su perro esté protegido contra estos parásitos potencialmente dañinos.
Si sospecha que su perro puede estar sufriendo de una infección parasitaria interna, consulte a su veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. La detección temprana y el tratamiento de los parásitos internos en perros son esenciales para prevenir complicaciones y garantizar una vida saludable y feliz para su mascota.